Sobremesas en la escuela.
Jornadas Culturales 07 Escuela abierta
Tres sobremesas han ocupado esta semana mi labor didáctica en el colegio de mi pueblo. Con la inestimable colaboración de Lourdes y Loli, la hora y media de cada sesión se han convertido en un disfrute de entretenimiento, juego, intercambio y promoción de la cerámica.
Críos de cinco a diez años, atentos al video de Azulejo de Arista que rememora el proceso de nuestro azulejo mudéjar, cuentos que ocurrieron hace quinientos años, patrimonio y familiaridad todavía en nuestro pueblo pequeño.
Cada alumno ha podido marcar su recuerdo en un trocito de barro, con forma de azulejo; tal vez les acompañará durante años en su habitación, sus cajones, su jardín,
Hay que tener en cuenta que la ciencia y tecnología cerámica evoluciona constantemente, aislantes de altas temperaturas, prótesis dentales y de titanio, recubrimientos arquitectónicos de suelos y muros
Y yo que les voy a contar a los niños?... La arcilla, ese juego, ese hilo de la historia.
Veo clara nuestra realidad, el ceramista creativo, el alfarero, es una especie en extinción. El que juega con el barro, el que disfruta, el que quiere aprender más y más, es una especie que debería estar protegida.
Tal vez el barro enterrará a la Play Station, a la imagen y al sonido virtual.
Todos desearemos volver a jugar con la arcilla.
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