La Odisea de todos los días.

Estos días me he codeado con la Odisea, con los Ulises, con las Penélopes y los Telémacos, con las tormentas marinas, con todos los pretendientes y enamorados, con aventureros y soñadores, con artistas y creativos respetuosos. Siempre con los personajes positivos que aspiran a disfrutar de la vida.

Estos días he trabajado con los alumnos de San Gabriel un mural sobre la Odisea, sirva de inspiración, sirva de excusa, sirva para retornar al blog…

El camino hacia Ítaca está repleto de emociones, de historias, de vivencias y pervivencias…

Talleres aquí y allá, crisis informática (rotura de ordenador, perdida de datos, recuperación emocional,…), encargos variados de corto, largo y medio pelo. Proyectos de proyectar, de presupuestar el presupuesto proyectado y predefinir la idea proyectada con el presupuesto adecuado.

La Odisea de todos los días. Abrir los ojos, el ordenador, mensajes, Facebook, curiosidades,…
También podemos consultar los movimientos bancarios, los encargos, las canciones de Mark Knopfler,…Una vez superada esta etapa, el día nos debería llevar a tocar la arcilla, a modelar, incluso a coger el teléfono entre pieza y pieza.
Los horarios de rutina culinaria son un reloj fisiológico, incluso la siesta surrealista de 3, 4 o 5 minutos,..

La Odisea nos sigue empujando por esta hermosa vida escogida entre barros de colores, con alguna lágrima mojando el camino, pero repleta de ilusiones y sonrisas que nos llevan en volandas hacia ese horizonte que cuanto más nos acercamos más se aleja.

¡Feliz y buen viaje!