Taller 1994.
Dos años después el taller se transformó en un centro de energías manuales, siempre me ha gustado estar rodeado de colaboradores y buen ambiente. No recuerdo muy bien que estábamos produciendo en esas fechas, pero distingo muy bien las caras.
De izquierda a derecha: mi hija Laura con seis años enredando con barro, al fondo sosteniendo en brazos a Andrés con un año mamando barro, las chicas que curran Mª Teresa, Marta y Viquy, en el torno Carmen Zubizarreta intentando lo casi posible
Cuatros años mas tarde llegamos a trabajar en el taller siete personas, fueron los años gloriosos de la Catedral de La Seo y el Palacio de la Aljafería.
¡Cuánta gente por el taller! ¡Que agobio! Con lo tranquilo que se está ahora
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