Paseo por Barcelona.

El domingo quise rememorar mi Barcelona de estudiante, desde la plaza Cataluña, las Ramblas, el barrio gótico, mis antiguas viviendas cerca de la Massana, mis rincones, las fiestas de la Merce,…
La mayoría de las piedras estaban en el mismo sitio pero el espíritu y el aspecto de muchos rincones de la ciudad habían cambiado. Los ojos de turista siempre son diferentes, los bolsillos con euros y las manos con cámaras digitales recrean una visión realmente ociosa del momento, de la circunstancia internacional.
Pasear por Barcelona siempre me brinda cantidad de imágenes, sentimientos, momentos para reflexionar, sensaciones para elucubrar y soñar.

En la foto: La catedral con pantallas de plasma anunciando confesiones, visitas al terrat por 2,50 €, etc…; mientras, en el coro cantan la misa con los hábitos blancos…
Los arcos y los santos centenarios permanecen, crédulos, ante el peregrinaje que se les avecina. Así sea.