Alfar Mudéjar siglo XXI. Catálogo.
Alfar, taller, obrador, fábrica, estudio, paraíso,
El espacio para crear con barro es importante, debe tener una zona para la tierra, agua, aire, y el rincón para el altar del fuego.
Los procesos milenarios se repiten, hoy las nuevas tecnologías nos permiten disfrutar todavía más de nuestro trabajo.
El Barro, preparado por la industria, mezclado y libre de impurezas nos llega por transporte inmediato a la puerta del taller. Embasado al vacío y con el grado de humedad deseada lo podemos almacenar en cualquier rincón durante meses.
La Decoración, mediante pinceles de pelo seleccionado, peras de goma, esmaltes de estaño fritados con el rango de fusión adecuado, balanzas de precisión, tamices y palanganas de diseño.
El Horno, ofrece la opción de gas o electricidad. Decidiremos según el tamaño, el volumen y la temperatura. El programador y el pirómetro nos proporcionarán la transformación de los elementos en su punto preciso.
A pesar de los nuevos medios incorporados a los talleres actuales, el proceso cerámico sigue siendo el mismo, la transformación de los elementos, la magia de la cerámica.
Poco ha cambiado desde que los talleres de la ribera del Huerva realizaran los azulejos para la Catedral de Zaragoza hace 400 años.
El espacio para crear con barro es importante, debe tener una zona para la tierra, agua, aire, y el rincón para el altar del fuego.
Los procesos milenarios se repiten, hoy las nuevas tecnologías nos permiten disfrutar todavía más de nuestro trabajo.
El Barro, preparado por la industria, mezclado y libre de impurezas nos llega por transporte inmediato a la puerta del taller. Embasado al vacío y con el grado de humedad deseada lo podemos almacenar en cualquier rincón durante meses.
La Decoración, mediante pinceles de pelo seleccionado, peras de goma, esmaltes de estaño fritados con el rango de fusión adecuado, balanzas de precisión, tamices y palanganas de diseño.
El Horno, ofrece la opción de gas o electricidad. Decidiremos según el tamaño, el volumen y la temperatura. El programador y el pirómetro nos proporcionarán la transformación de los elementos en su punto preciso.
A pesar de los nuevos medios incorporados a los talleres actuales, el proceso cerámico sigue siendo el mismo, la transformación de los elementos, la magia de la cerámica.
Poco ha cambiado desde que los talleres de la ribera del Huerva realizaran los azulejos para la Catedral de Zaragoza hace 400 años.
0 comentarios