Asas 3. (1981)
Aquel año quería cumplir los veinticuatro y parecía que había descubierto los botijos.
Eso si que es un asa bien puesta, la sujeto con el pulgar queriendo jugar con el péndulo botijero, la inestabilidad, la fragilidad, el botijo está en la cuerda floja, en el dedo flojo, en realidad lo amo y lo respeto.
En mi mano derecha sujeto con mas firmeza una de mis piezas, con cuatro asas, son asas tímidas, como pequeñas pinceladas que salpican la superficie de la vasija, en esas asas no me cabe el pulgar, ni el meñique, Sólo caben un montón de sueños.
El cigarro entre los dedos manchados de barro ahúma la pieza y el mono de mecánico me reviste de comodidad.
2 comentarios
Fernando -
un abrazo muy fuerte,
María -
Besos, María