despues de una semana y pico sigo encantada con lo vivido en Muel con los domadores del fuego. Es la sensación de que todavía quedan sitios donde se puede vivir, donde relacionarse, reir, crear y soñar que con esta gente todo es posible. La acogida de la gente del pueblo, la amabilidad del trato, la sencillez de los artistas, la emoción creada a través de sus obras han sido momentos que no pueden olvidarse tan facilmente. He ido tres veces a Muel y cada vez ha sido mejor, la última, esta creo que la recordaré durante mucho tiempo. Va muccho más allá de la cerámica y el fuego aunque eso fuera lo que nos llevó allí. Fue el ambiente que se creó, la comunicación, la "magia", las personas fue especial y sólo desde que pase este año y pueda realizarse al año que viene, en todo caso queda lo vivido. Un abrazo a Fernando Malo por ser tan majo. Y por tener un foro dondo yo pueda dejarlo dicho.
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isabel -